-- Enviado desde mi HP TouchPad
El jun 8, 2012 1:51 PM, Marta E. González <martaeugenia96@gmail.com> escribió:
Yo también estaré con Paul hasta la muerte PAUL WATSON Cuando la gente me pregunta que voy a hacer cuando me retire, mi respuesta es que no tengo la intención de retirarme. Actuar con Sea Shepherd no es un trabajo para mí, sino toda mi vida.
Mi pasión por defender a las ballenas nació en 1975, cuando tenía 24 años. Ocurrió a lo largo de las costas de California donde Bob Hunter y yo fuimos los primeros en interponernos entre los arpones y las ballenas durante nuestra intervención contra la flota ballenera soviética.
Un arpón fue tirado por encima de nuestras cabezas y alcanzó una hembra en un grupo de 8 cachalotes. Gritó, y la mayor ballena del grupo, un macho enorme, se hundió en el agua y se posicionó bajo nosotros antes de emerger de nuevo para atacar el buque ballenero y defender su grupo.
Pero los soviéticos lo esperaban con un arpón que le dispararon a quemarropa, en medio de la cabeza. La ballena gritó de dolor y volvió a caer en el agua que enrojeció en unos segundos. Agonizó a la superficie del agua y pude ver su mirada. Se hundió poco a poco y de repente, volvió a aparecer. Vi su enorme cabeza salir del agua y acercarse a nosotros, derramando mucha sangre. Miré su ojo, un ojo del tamaño de mi puño y lo que vi cambió mi vida para siempre. He podido ver comprensión. Este animal había comprendido lo que intentábamos hacer. Nos miró unos segundos y se hundió en el mar, hacia atrás, para no caernos encima. Se hundió poco a poco. Había muerto.
Nos salvó la vida. Podría habernos matado con un coletazo pero nos dejó vivir. Le debo la vida.
Vi otra cosa en el ojo de esta ballena. Piedad. No por ella, sino por nosotros. Somos una especie capaz de matar tan fácilmente, tan despiadadamente, y ¿para qué? Los rusos mataban a esos animales para extraer su aceite, que constituía un excelente lubricante para sus máquinas. Máquinas que se empleaban para fabricar misiles…
Fue entonces, cuando el sol caía sobre el cuerpo sin vida de una criatura tan sorprendente, que un pensamiento estremecedor me vino a la mente: nuestra especie está totalmente loca.
Aquel día, decidí que dedicaría mi vida para salvar a las ballenas. Desde entonces las defiendo, junto con todas las especies marinas, desde hace más de 35 años.
Lo haré hasta mi muerte. […] "Mientras que el hombre siga como despiadado destructor de seres vivientes menores, nunca conocerá la salud ni la paz. Mientras dure la masacre de los hombres hacia los animales, el hombre se seguirá matando entre sí. De hecho, aquél que siembra las semillas de muerte y dolor no puede cosechar alegría y amor." Pitágoras -- |
--
Has recibido este mensaje porque estás suscrito al grupo "Francia" de Grupos de Google.
Para publicar una entrada en este grupo, envía un correo electrónico a francia@googlegroups.com.
Para anular tu suscripción a este grupo, envía un correo electrónico a francia+unsubscribe@googlegroups.com
Para tener acceso a más opciones, visita el grupo en http://groups.google.com/group/francia?hl=es.
0 comentarios:
Publicar un comentario